La inquietante predicción de Nostradamus sobre el futuro del Reino Unido tras la muerte de Isabel II

La muerte de la Reina Isabel II sacudió al Reino Unido y al mundo, ya que marca el fin de una era. Y se hace viral  una predicción del adivino francés Nostradamus, que fue dada a conocer a principios de año por el grupo de estudios Above Top Secret,.

En un poema llamado Century 8 Quatrain 97, Nostradamus afirmó: “Al final de la guerra, las grandes potencias cambian. Cerca de la costa nacen tres hermosos niños. Arruinarán al pueblo cuando sean mayores de edad. Cambiarán el reino y no lo verán crecer más”.

 A la hora de empezar a desglosar lo escrito, los especialistas que se encuentran en el foro comenzaron a atar cabos y admitieron que en la parte que se refieren a los niños, se trataría de los nietos de la hasta entonces Reina: el príncipe Harry, el príncipe William y la princesa Beatriz.

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En cuanto al conflicto bélico que señala el advino sobre “el final de la guerra”, los foristas coincidieron que se refería al combate de Malvinas. Sin embargo, Europa también vive aún el conflicto entre Rusia y Ucrania, por lo que podría referirse a eso. Por último, en la frase que señala a la costa, los analistas llegaron a un acuerdo que podría referirse al río Támesis, ubicado en Londres, o el mar que rodea a Reino Unido.

Los que creen sostienen que la monarquía británica podría entrar en declive tras la muerte de la Reina Isabel y refuerzan esa hipótesis con el argumento de que el Rey Carlos no estará mucho tiempo en el trono debido a su avanzada edad (73) y William, el segundo de la línea, tendría en mente reconvertir al país en una república.

Mientras tanto, y en paralelo a las ideas basadas en la futurología, el rey Carlos III de Inglaterra ya comenzó con su reinado, pero sin dejar atrás el recuerdo de su fallecida madre. Así, compartió en un programa especial de la BBC momentos de su infancia junto a Isabel II, como cuando ensayaba para llevar la corona. “Nunca la olvidaré”, cuenta el nuevo monarca, sentado junto a una imagen de juventud de Isabel II, en un programa de la radiotelevisión pública británica en el que reconoce que se le hará “difícil” la ausencia.