¿Qué son los biorritmos?

Desde el comienzo de los tiempos, el mundo natural ha sido gobernado por los ritmos y ciclos que regulan la vida. El día sigue a la noche. En primavera la sabia asciende y los brotes florecen; en otoño, las hojas se secan y caen. Todas las criaturas, desde una anguila hasta el mas poderoso, siguen repetidos esquemas biológicos de actividad y descanso.

Hace unos 3.000 años, los científicos de la antigua Grecia registraron los ritmos regulares de las funciones corporales básicas, tales como la respiración, la actividad renal, el ritmo del pulso y, por supuesto, el ciclo menstrual femenino.

En nuestra gran mayoría, apenas hemos pensado en ellos alguna vez, sin embargo, estos rítmicos cíclicos afectan a todas las células de nuestro organismo, desde el momento de nuestro nacimiento hasta el de nuestra muerte.

Hipócrates, el célebre médico griego, observó que los días buenos y malos fluctuaban cíclicamente, tanto en los enfermos como en las personas sanas.

Sin embargo, la teoría de los tres ciclos internos con un efecto claro en los esquemas de comportamiento no ganó credibilidad en nuestra sociedad hasta hace relativamente poco, y su uso práctico ha sido apreciado por muchas personas de muy diversos campos. Estos tres ciclos, el físico, el emocional y el intelectual, se denominan colectivamente biorritmos.

Aunque es difícil demostrarlo mediante tests de laboratorio, muchos creen que representan la clave de nuestros, aparentemente aleatorios, días “altos” y días “bajos”, y todo, desde hazañas físicas a accidentes de aviación, ha sido atribuido a su influencia.

Cada persona tiene un ritmo particular, que se inicia el día de su nacimiento y continúa durante toda su vida hasta el momento de su muerte. El ciclo físico dura 23 días y afecta a la energía, la velocidad, la coordinación, la resistencia a la infección y la vitalidad general. El ciclo emocional dura 28 días y gobierna el estado de ánimo, la sensibilidad y la creatividad. El ciclo intelectual de 33 días afecta a la memoria, la concentración y la claridad de ideas.

Días críticos

Los tres ciclos pasan por fases positivas (ascendentes) y negativas (descendentes). Los días en los que un ciclo pasa de positivo a negativo o viceversa se denominan días “críticos”.

Hay tres días críticos en cada ciclo, y se ha demostrado estadísticamente que ocurren más accidentes esos días que en cualquier otro momento del ciclo. Un estadio de accidentes en vuelos interiores estadounidenses ha demostrado que el 80 por ciento se produjo cuando el biorritmo del piloto o del copiloto se encuentra en un nivel crítico.

Talentos heredados

La intensidad relativa del ritmo físico, emocional e intelectual varía de acuerdo con las características congénitas de la persona. Un atleta puede presta especial atención a su ritmo físico, mientras que un maestro puede estar más interesado en su ritmo intelectual.

Pero debe recordarse que los tres ciclos interactúan para crear una imagen completa. Análogamente, mucha personas son eficientes en sus días críticos porque son conscientes de que no están en su mejor forma y, por lo tanto, dedican un mayor esfuerzo a la tarea que están realizando, hasta el punto de superar las debilidades. 

Comportamiento potencial

Los biorritmos no son oráculos, ni predicen los accidentes, berrinches o destellos de genio en un día específico. Sin embargo, nos permiten saber por anticipado cuáles serán nuestros días “bajos” y en qué días estaremos probablemente “altos”. Así pues, tanto si lo que nos preocupa es una entrevista para obtener un empleo, la armonía sexual o la iniciación en la práctica de un nuevo deporte, podemos usar este conocimiento de la forma más provechosa.