¿Tenemos todos el don de la percepción extrasensorial?

Mientras muchas personas creen que estas habilidades están de algún modo relacionadas con lo sobrenatural, la mayoría de los profesionales modernos considera que los poderes extrasensoriales permanecen dormidos en la mayoría de nosotros, y que todo se reduce a una simple cuestión de aprender a despertarlos.

Algunos psicólogos argumentan que la percepción extrasensorial es un sentido primario como el tacto o el gusto, y que no tiene relación con la inteligencia o la educación. Evidente en los animales salvajes, que perciben el peligro y los cambios climáticos, o en los animales domésticos, que recorren largas distancias para encontrar a sus dueños, ¿es un don que el hombre ha perdido como precio de su evolución?

Las principales potencias del mundo han invertido enormes sumas de dinero investigando la percepción extrasensorial. Claramente, este sexto sentido podría brindar grandes y sospechosos beneficios si se lo aplicara a las estrategias de gobierno. Otra es la dimensión del tema en el terreno individual.

¿Qué métodos podemos usar para desarrollar nuestros propios poderes ocultos?

La decisión de comenzar a flexionar los “músculos psíquicos” no se debe tomar en broma. La mayoría de las grandes universidades del mundo dedica cada vez más esfuerzos al estudio de lo profundo del psiquismo humano, incluso en temas como la habilidad de predecir el futuro y registrar señales acerca de la mejor manera de abordar ciertos problemas y cuáles son los límites de la prudencia para actuar.

El primer paso de cualquier intento psíquico en la relajación, dado que la tensión bloquea el flujo natural de las ondas alfa, o sea, la actividad eléctrica en la parte intuitiva de nuestro cerebro asociada con la percepción extrasensorial. En palabras más simples, esto significa “desconectarse” del entorno inmediato.

Técnicas como el yoga, la meditación transcendental o el Control Mental Silva puede ayudar para alcanzar este estado alterado (algunos dirían superior) de conciencia preciso para la percepción extrasensorial.

Contacto telepático

Diversos experimentos científicos han demostrado que los mensajes de la mente pueden recorrer distancias muy grandes. Se cree que esta telepatía es más fácil entre personas que se conocen bien, como lo demuestran los casos de muchas parejas, padres e hijos, hermanos y hermanas, que aseguran haber “contactado” a la otra persona antes de un problema.

Al mismo tiempo, merece la pena empezar los primeros experimentos con alguien cercano, siempre procurando dar una respuesta instintiva antes que cerebral y pensada.

Las cartas de Zener son tal vez la forma más simple de comprobar la transferencia de pensamientos. Se pueden encontrar en una tienda y vienen en juegos de 25 con un número idéntico de figuras: círculo, estrella, olla, cuadrado cruz.

 Las cartas se mezclan y las ve una persona a la vez (el transmisor), que mentalmente se representa cada imagen e intenta transmitírsela al compañero (el receptor), para que pueda adivinar qué carta era la señalada. El factor de probabilidades de adivinar es de uno a cinco; todo lo que superes este índice indica alguna habilidad telepática genuina.

Otros dibujos e imágenes también pueden usarse para probar las uniones telepáticas. Por ejemplo, haga una serie de dibujos y luego compruebe si su compañero puede ponerse “a tono” con su mente y describirlo sin haberlos observado.

Intente cambiar los roles, recibiendo mensajes a la vez que se esfuerza por enviarlos.

Pensar en un amigo y que éste llame pronto, o soñar con algo que al poco tiempo sucede son hechos que sugieren un talento intuitivo para predecir el futuro. Mantener un diario personal para registrar estos hechos pueden servir como referencia para alentar la confianza y animar al desarrollo de estos poderes.

Para experimentar, intente adivinar cómo irá vestido un amigo determinado la próxima vez que lo vea, o cuál será la siguiente canción que emitirá la emisora de radio. Comente esta predicción con alguien o escríbala, pero no preste atención a los inevitables errores del principio.

La práctica es lo más importante y, a medida que crezca su talento instintivo, su índice de triunfos será mucho mayor.

La bola de cristal

Muchas personas aún consideran que el arte de usar una bola de cristal para ver en su interior el futuro y el pasado es una mentira flagrante.

Según las tendencias actuales, no obstante, la bola no es más que un foco para la mente intuitiva, donde los pensamientos personales y las visiones se proyectan con un efecto óptico conocido como “bultos”. Pueden constituir una especie de niebla, símbolos abstractos e incluso escenas de la vida real.

Aunque todos los expertos en este arte no se distraen jamás con el entorno, los neófitos se sienten más cómodos en una habitación en penumbra. Una tela oscura debajo de la bola también evitará reflejos no deseados. Pero sea paciente, puede llevarle varias sesiones empezar a ver algo.

Las tradiciones de este arte han sido sistematizadas por algunos aficionados a quienes les ha resultado difícil al principio encontrar algún significado en las nieblas que venían. Las nubes verdes o azules señalan alegría; las amarillas, rojas o anaranjadas pueden significar malos momentos. Una niebla que se eleva da una respuesta positiva; si desciende, significa que la respuesta es negativa.

Impresiones psicométricas

El arte de obtener impresiones sobre una persona a partir de lago que poseía es una forma de percepción extrasensorial conocida como psicometría.

Los profesionales creen que es posible recibir información personal de la energía almacenada en simples objetos como pendientes, relojes o cualquier cosa que haya sido usada por la persona durante varios meses. La técnica ha sido utilizada para ayudar a la policía a detectar delitos o para encontrar a personas desaparecidas.

Para comprobar sus propios poderes de psicometría, sostenga algo que pertenezca a un amigo en la palma de la mano, con suavidad. Sin pensar en ello, trate de tener conciencia del objeto y vea qué mensajes intuitivos le parecen en la mente.

Abrir la puerta

La clave para desarrollar los poderes de la transmisión extrasensorial es creer realmente en lo que se quiere lograr. Los experimentos científicos han demostrado que las personas que reconocen la existencia de sus propias habilidades psíquicas ciertamente logran mejores resultados en las pruebas de clarividencia que las que se consideran escépticas con el tema.

Ignorar las cosas simplemente porque parecen improbables podría frenar la espontaneidad, que es tan importante en el mundo de los fenómenos psíquicos.

De niños se nos enseña a pensar y operar en solitario sobre la base de evidencia concretas, e incluso los padres pueden reñir al niño por “imaginar cosas”. Si estos destellos infantiles y simples volvieran a encenderse, y si se pudiera entrenar a la mente para que oyera su voz instintiva, tal vez un día todos podríamos hacer uso del evasivo “sexto sentido”.

La humanidad puede llegar sin duda a gozar de estas posibilidades que subyacen desaprovechadas en su naturaleza más íntima.