¿Cómo te sientes conviviendo con otras personas?

Ya sea que vivas con amigos, con tu familia o con tu pareja, tu actitud básica hacia la convivencia estará marcada en tu carta astral. La comprensión de los principios que encierra puede ayudarte a la convivencia familiar, dado que lo que se aplica a nuestras propias relaciones a menudo se puede aplicar también a las de otras personas. 

Algunos signos cambian su rumbo por el simple hecho de evitar discusiones, mientras que otros medran en todos los conflictos, algunos olvidad y perdonan, y otros siempre guardan rencor.

Indicadores de relaciones

Los astrólogos miran Casas específicas en la carta astral para ver de qué manera enfocar ciertos tipos de relaciones de convivencia y quienes pueden ser buenos compañeros. Las Casas Cuarta y Décima simbolizan nuestra propia relación con nuestros padres, mientras que la Undécima señala el tipo de amistades en que probablemente participaremos. 

Asimismo, los romances aparecen en la Casa Quinta, así como los hijos, mientras que la Séptima y la Octava describen nuestro enfoque hacia las relaciones amorosas permanentes y las necesidades sexuales. En términos generales, los signos sobre las cúspides de estas Casas muestran cuáles son los signos compatibles para las diversas actividades en cuestión. 

Incluso cuando se desconoce la hora del nacimiento, imposibilitando calcular el Ascendente y las posiciones de las Casas, se puede tener una idea bastante buena de la compatibilidad imaginando que los signos son Casas, continuando a través del Zodíaco a partir de su signo Sol. Entonces, para Aries el signo de la “Quinta Casa” es Leo (el quinto siguiendo el orden), para Tauro es Virgo, para Géminis es Libra, y así sucesivamente. Todas estas combinaciones comparten una compatibilidad básica en la que se refiere a romances y a los hijos. 

Al mismo tiempo, un ariano puede buscar a un Libra (el séptimo singo en orden) como pareja de larga duración, o a un escorpiano (el octavo signo a partir de Aries) para compartir sus necesidades sexuales. Los acuarianos tienen buenas relaciones de convivencia amistosa con Aries, dado que distan once signos y, por lo tanto, tienen una unión con la Casa Undécima de la amistad.

Compartir la casa

Cuando se elige un compañero de piso merece la pena tener en cuenta su signo, no sólo para que las cosas guarden cierta armonía, sino para encontrar equilibrio en lo que pudiese faltar. Por ejemplo, un piso compartido por signos de Fuego y Aire rápidamente se encontrará sin tazas limpias.

Estas lamentables e incómodas catástrofes pocas veces les suceden a los más ordenados signos de Tierra, pero éstos podrían necesitar el estímulo de los signos más sociables e impetuosos para que puedan funcionar bien. Asimismo, un piso donde convivan emocionales signos de Agua podría traducirse en un ambiente demasiado melancólico para el que haya nacido bajo un signo más independiente o extravertido.

A menos que el compartir una vivienda se organice cuidadosamente, los signos de Tierra podrían acabar sintiéndose resentidos porque parecería que son los únicos que hacen el trabajo del hogar; compartir un piso con un organizado y limpio Virgo podría ser un placer para algunos, pero una pesadilla para otros. Vivir con un cotilla geminiano o con un Libra, propenso a los romances, podría resultar intolerable para los escorpianos, que valoran la privacidad, o para el tímido y retraído canceriano. 

Cuestiones familiares

Pese a que no tenemos control sobre los signos de Sol de nuestros padres, ciertamente podemos usar la astrología para entenderlos mejor. Casi lo mismo ocurre con los hijos, a menos, desde luego, que se planifique su nacimiento tendiendo en cuenta la compatibilidad.

Los niños de los signos de Agua son mucho más tranquilos y más pasivos que los nacidos bajo los signos de Aire, mucho más conversadores y extravertidos. Los niños de los signos de Fuego tienden a rebelarse contra las imposiciones de los padres, mientras que los niños de Tierra necesitan de tales imposiciones para que regulen su vida y establezcan un sentido de seguridad.

Los padres que pertenecen a signos extravertidos pueden ayudar a un niño introvertido para que se adapte socialmente, pero deben prestar atención al mismo tiempo a las necesidades del niño a retirarse del mundo y recargarse emocionalmente. Asimismo, los padres atormentados por niños pertenecientes a signos de Aire, que no paran de hablar, harían bien en introducirlos en un mundo de lectura y fantasía.

Compañeros sexuales

Cuando la gente convive en una relación de dos, la compatibilidad de las necesidades sexuales y emocionales jugará un papel obviamente muy importante.

Escorpio es un signo notable por su alto nivel de energía sexual, pero los signos de Fuego también tienen una tendencia fuerte hacia el sexo, como la tienen Tauro, Cáncer y Capricornio (aunque menos evidente). El casto Virgo y el soñador Piscis, por contraste, son dos signos con una lívido tradicionalmente mucho más débil. Asimismo, tanto Géminis como Acuario pueden llegar a discutir tanto sobre el sexo que se olvidarán de llevar a cabo el acto amoroso.

En lo que respecta a las emociones, la desigualdad entre un soñador geminiano y un apegado canceriano podría acarrear problemas de frialdad emocional, por un lado, y restricción por el otro (aunque la ubicación compatible de la Luna y Venus haría que las cosas funcionaran mejor). Asimismo, podría haber una grieta emocional entre el convencional capricorniano y el excéntrico acuariano debido a los diferentes estilos de vida.

Con respecto a las otras relaciones, conociendo las razones astrológicas se podría ayudar mucho a evitar conflictos. El desordenado sagitariano y el ordenado virginiano sin duda deberían establecer algunas reglamentaciones hogareñas con respecto a la limpieza, así como el impulsivo Sagitario debería conocer la necesidad de Virgo de un estilo de vida ordenado, advirtiéndole simplemente que dará una fiesta en casa.