Descubre cómo la carta natal te ayuda a decidir en los momentos importantes de tu vida

Puedes hacerte una idea general del enfoque de cada signo para tomar decisiones considerando su cualidad (la cual describe sus caracteres más obvios) y el elemento al que pertenece (que muestra su naturaleza fundamental).

En un sentido amplio, los signos que pertenecen al grupo Cardinal (Aries, Cáncer, Libra y Capricornio) tienden a ser más dinámicos que los de los otros dos. Ello se debe a que lo Cardinal se caracteriza por la capacidad par entrar en acción e ir hacia adelante, más que quedarse clavados como suelen hacer los signos Fijos, o para cambiar de opinión como los signos Mutables. Es decir, Cáncer puede causar vacilaciones en muchos momentos, mientras que, en su mayoría, los Libra sólo suelen ser decididos cuando están de humor, lo cual no es muy frecuente. 

Signos inflexibles

Los signos Fijos (Tauro, Leo, Escorpio y Acuario) suelen ser bastante inflexibles al tomar decisiones y tienen en cuenta los consejos de los demás. Los Acuario pueden escuchar, pero eso no quiere decir que vayan a hacer ningún caso. 

Asimismo, una vez que estos signos toman una decisión, es casi imposible que cambien: pospondrán hacer algo más todo lo que puedan a causa de la desorganización que probablemente implique. 

Con los signos Mutables (Géminis, Virgo, Sagitario y Piscis) ocurre lo contrario. Les estimula tanto la idea del cambio, que se pueden pasar horas discutiendo los entresijos de algo sin llegar a ninguna conclusión. 

Del mismo modo, cuando verdaderamente toman una decisión, les suele preocupar y pueden cambiar de opinión; para ellos, las opciones siempre se han de mantener abiertas.

Géminis y Piscis son muy influenciables; cambian de opinión según con quién estén, mientras que el ardiente Sagitario es más testarudo, aunque muchas veces cae víctima de sus propios presentimientos. El más decidido del grupo tiende a ser Virgo, cuyo elemento práctico terrestre actúa como un factor estabilizador. 

Decisiones de los Elementos

Con respeto a los cuatro Elementos, los más decisivos son el Fuego y la Tierra. 

Los signos de Fuego (Aries, Leo, Sagitario) tienen el coraje de manifestar sus convicciones y suficiente visión para no dejarse dominar por las emociones. Algunas veces se dejan llevar demasiado por su propio entusiasmo o el de los demás, pero, cuando toman una decisión, su fuerza de voluntad y su energía les alcanza para realizarla.

Los signos de Tierra (Tauro, Virgo, Capricornio) carecen de lo tajante del Fuego, pero su conocimiento natural de las cuestiones prácticas les proporciona prudencia a la hora de cambiar las cosas. Son realistas, capaces de un pensamiento claro, lógico y frío. Una vez que han tomado una decisión, utilizan su habilidad para planificar y su determinación para ponerse en marcha. 

Los signos regulados por el Aire (Géminis, Libra, Acuario) tienen excelentes facultades intelectuales, pueden separarse de las cuestiones emotivas y suelen buscar el consejo de los demás. 

Desafortunadamente, tienden a navegar, y carecen de la determinación del Fuego y de la Tierra para llevar a término un propósito. Probablemente, las opiniones de los demás influyen en ellos demasiado. 

Se puede aplicar lo mismo a los signos de Agua (Cáncer, Escorpio y Piscis), para los que resulta difícil separarse de los aspectos emocionales de una situación y pueden postergar sus decisiones. Esto es verdad sobre todo en Piscis y Cáncer. Los Escorpio son demasiado orgullosos para cambiar de opinión y prefieren, en cambio, sufrir en silencio. 

Factores decisivos

Para una indicación más precisa de la capacidad de decisión en la carta astral, observe dónde caen los planetas. Si en su mayoría están en signos Cardinales y/o de Fuego y Tierra (especialmente los planetas personales, en Ascendente y Mediocielo), las personas afectadas no deberían tener problemas. En este caso, los planetas en signos Fijos añadirán fuerza y resolución al proceso de toma de decisiones. 

Por otra parte, una carta con el acento en signos Mutables de Aire o Agua (especialmente este último) revela una persona propensa a vacilar cuando llega el momento de la verdad. Incluso los planetas Fijos no pueden ayudarlo, pues proporcionan más terquedad que fuerza. 

El cuadro podría mejorar si se tuviera en cuenta el relativo rol de las Casas: los planetas de las Casas angulares (Primera, Cuarta, Séptima y Décima) aumentan la capacidad de decisión independientemente del signo, mientras que los de las Casas Tercera, Sexta, Novena y Duodécima tienden a debilitarla. Tampoco deberían ignorarse los aspectos de los planetas, siendo especialmente útiles los que abarcan el Sol, Marte y Urano. 

Cabe consignar que, desde sus comienzos, la astrología se abocó al estudio de los astros para llegar a establecer su incidencia en las decisiones adoptadas por los seres humanos. 

Es sabido que los antiguos reyes y señores de Oriente, donde comenzó el saber astrológico, consultaban por medio de sus asesores y consejeros especializados la predisposición del Zodíaco antes de adoptar sus grandes decisiones, sobre todo en relación con la guerra. Muchos combates y monumentales campañas bélicas fueron emprendidas o dejadas de lado porque los astros no se mostraban benevolentes ni propicios. 

Muchos estadistas actuales también tienen astrólogos entre los miembros de sus equipos asesores.