Quién es y cómo vive Mary Austin, la mujer a la que Freddie Mercury le dejó su fortuna

Fue su primera novia y su amiga incondicional. Solo ella sabe dónde está enterrado. El cantante de Queen le dejó a ella y a sus hijos una mansión y millones de dólares.

Espectáculos 24/11/2021 redacción WTF redacción WTF
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A 30 años de la muerte de Freddie Mercury se saben muchas cosas del cantante: que murió de SIDA, que se animó a ser gay en los 80´y que con él se fue un talento irremplazable. Pero pocos saben que la canción "Love of my life" era para Mary Austin, su primera novia y su amiga incondicional de toda la vida.

Su verdadero nombre era Farrokh Bulsara y había nacido en  Zanzíbar, África. Su familia se mudó a Gran Bretaña y allí conoció a Mary, de quien dijo era su alma gemela. Ella aceptó su bisexualidad, sus desenfrenos y su vida y nunca se separó de su lado, aunque más tarde se casó con un empresario y tuvo dos hijos.

Hoy Mary tiene 70 años y vive en una mansión de un exclusivo barrio de Londres. Nunca dio notas, no cuenta nada de Mercury y sigue siendo fiel al legado del hombre que decidió dejarle a ella y a sus niños casi toda su fortuna al morir en 1991.  

“Los meses posteriores a la muerte de Freddie fueron los más solitarios y difíciles de mi vida. Tuve muchos problemas para aceptar que se había ido y todo lo que me había dejado”, contó alguna vez Mary 


Según el documental Freddie Mercury: The Untold Story, Freddie y el guitarrista Brian May acudían a menudo durante los setenta a la boutique londinense Biba, donde conoció a la mujer a la que calificó como "esposa".

Vivieron juntos como pareja durante seis años. Mercury reveló a Austin que era gay en 1976 y ella siguió a su lado.

Cuando Mercury abandonó el apartamento que compartían en West Kensington, Londres, ya convertido en un cantante de fama global y millonario, le compró a Austin una casa cerca y le dio empleo como su asistente personal. Él se mudó a una casa en Stafford Terrace, en la que vivió antes de mudarse al que sería su último hogar, Garden Lodge. Estaba cerca del apartamento de Mary. Según algunos, hasta podía ver la casa de Mary desde allí.

Mercury empezó a tener relaciones con hombres más a menudo. Algunas con un carácter más ambiguo (como la que mantuvo con el DJ Kenny Everett) y otras relaciones sentimentales en toda regla (con Jim Hutton estuvo desde 1985 hasta su muerte). Pero a Mary se referiría siempre como “mi esposa".

"Para mí, fue un matrimonio. Creemos el uno en el otro. Todos mis amantes me han preguntado por qué no podrían reemplazar a Mary. Es porque es sencillamente imposible”, declaró el cantante. 

Ella se casó con el empresario Piers Cameron y tuvo dos hijos: Richard, que tuvo como padrino a Mercury, y  Jamie, nacido ya tras la muerte del cantante.

Ella heredó la mansión de Garden Lodge, valorada en 22,5 millones de euros de la época, y la mitad de su fortuna (y futuras ganancias por derechos de autor), inicialmente valorada en más de nueve millones de euros. 

Hoy esa fortuna es incalculable, porque Mary y sus hijos siguen cobrando cada vez que se usan las canciones de Queen en cualquier plataforma.

A su última pareja,  Jim Hutton, Freddie dejó 560.000 euros. Lo mismo para su asistente personal, Peter Freestone, y para su cocinero, Joe Fanelli. A su hermana, el 25 por ciento restante de su patrimonio. A sus padres, hoy ya fallecidos, el otro 25.

Mary además es dueña de uno de los secretos mejor guardados del rock: el lugar donde esparció las cenizas del cantante de Queen. Las teorías son varias: que están en el jardín japonés de su mansión de Londres, que las esparció por un lago suizo donde Freddie iba en ocasiones en busca de paz o que regresaron a su Zanzíbar natal