¿Cómo comprender nuestros sueños?

El lenguaje de nuestros sueños es mas profundo de lo que pensamos, debemos ver como los analizamos para saber que significan.

Curiosidades 05/09/2020 S& S&
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Para comprender lo que nuestros sueños están intentando decirnos, necesitamos comprender primero su lenguaje. Pero los sueños raras veces emplean palabras para transmitir sus mensajes. En lugar de ellas, se comunican mediante imágenes visuales y también, pero en menor medida, a través de los otros cuatro sentidos: oído, olfato, gusto y tacto.

Las diversas imágenes, las que tenemos en nuestra imaginación, cuando estamos despiertos o las de escenas recordadas de nuestros sueños, eran consideradas, hasta no hace mucho, como una forma más primitiva de expresar, experimentar, procesar y evaluar acontecimientos de la vida en vez de recurrir al desarrollo del sofisticado lenguaje verbal. 

Sin embargo, actualmente muchas personas piensan que las imágenes no sólo son una forma superior de razonamiento y pensamiento, sino que constituyen la fuente primaria de toda conciencia y no únicamente una forma primitiva y elemental de evaluación.

Por lo tanto, es sorprendente que los sueños usen imágenes a modo de lenguaje. Las palabras intentan describir lo que está ocurriendo a nuestro alrededor en el mundo físico, pero, a veces no pueden representar de forma adecuada los sentimientos internos de miedo, dolor, esperanza y amor. Con las imágenes no existe este problema.

En los sueños, las imágenes tienden a ser simbólicas, englobando incidentes del pasado y problemas presentes, así como también acontecimientos que aún han de producirse. 

En las escenas soñadas, las personas, por ejemplo, no se representan necesariamente lo que aparentan ser, sino que más bien acuden a otra realidad: por ejemplo, un policía puede simbolizar el peso de la ley y el sentimiento de autoridad; una enfermera puede sugerir que cada uno debe cuidarse a si mismo, o la aparición de un corredor de larga distancia puede indicar que el sujeto debe hacerse fuerte y perseguir sus objetivos mas tenazmente. 

Con frecuencia, en nuestros sueños también aparecen celebridades. En este caso, estas imágenes tampoco representan lo aparente, sino posiblemente una ambición o incluso el deseo de compensar algo de lo que carecemos en nuestras vidas. 

De forma misteriosa el simbolismo de algunas expresiones que involucran el lenguaje del cuerpo con frecuencia es representado visualmente en nuestros sueños. Así pues, el concepto de estar “perdidamente enamorado” puede ser transmitido oníricamente a través de sobresaltos o saltos mortales. 

También los animales tienen una gran potencia alegórico. Es el caso de un hombre que regularmente soñaba con un cerdo sucio de lodo. No habría pensado jamás en el lenguaje simbólico de los sueños, hasta que finalmente una noche advirtió que el cerdo llevaba una corbata igual a la que habitualmente utilizaba el dueño de la empresa donde trabajaba. Este detalle le permitió dejar al descubierto los sentimientos de desagrado que dicha persona le inspiraba.

Aunque se piensa que el color también es significativo en los sueños, algunas personas creen que sólo sueñan en blanco y negro. La razón para esto radica posiblemente en que el color, si no juega ningún papel significativo, tiende a borrarse de la memoria, dejando únicamente una impresión monocromática.

De hecho, el color tiene a menudo un importante papel simbólico en nuestros sueños. Se dice que mucho sol en un sueño, por ejemplo, sugiere grandes esperanzas acerca del futuro; pero si una escena es apagada y gris, es probable que circunstancias deprimentes ejerzan una influencia en la persona que sueña.

Cuando en un sueño el rojo es especialmente visible, representa nuestras energías físicas. Sin embargo, a veces puede indicar ira o un deseo visceral de transformar la realidad circundante.

Se piensa que el violeta y el azul representan en los sueños influencias espirituales y elevadoras: mientras que el verde significa estabilidad emocional. De hecho, en una época se pintaban las salas de hospitales y las escuelas de verde pálido, reflejando un reconocimiento colectivo y quizás inconsciente de este hecho.

Se cree que el movimiento representa en un sueño el destino de la persona, reflejando sus progresos o su estancamiento a lo largo de la vida. Subir una colina, por ejemplo, representa cierta lucha contra alguna dificultad, tal como puede ser el esfuerzo personal que se está realizando en aras de un proyecto.

Un viaje en colectivo o en tren también puede referirse al sentido general del viaje a través de la vida, o sugerir que la persona que sueña se deja llevar por la corriente. El mensaje en este caso es que el sujeto debe ser mucho mas autosuficiente y apoyarse menos en los demás.

La puerta de los sueños

Los antiguos griegos creían que los sueños podían tener un carácter de advertencia o de profecía. Inventaron el concepto de dos puertas simbólicas para indicar las dos distintas categorías de sueños. Los sueños de advertencia se decía que pasaban a través de la Puerta de Marfil; los sueños proféticos, a través de la Puerta de Cuerno.

La mente que sueña utiliza plenamente las alusiones, de manera que no es sorprendente que estas puertas simbólicas helénicas se originasen en cierto juego de palabras. La palabra griega para decir “marfil” es elephas, que también significa “engañar”; mientras que la palabra griega para decir “cuerno” es karonoo, que también significa “lograr”. 

Como se ve, estas palabras representan lo que puede ser engañado o evitado (un sueño de advertencia) y lo que puede ser logrado (un sueño profético).