Eintracht Frankfurt llegó a la final de la Europa League tras 42 años y los hinchas invadieron el campo de juego

¿Hay algo más lindo que festejar un título? Posiblemente en el fútbol no, pero lo inmediatamente segundo, esa sensación de felicidad se da también cuando un equipo accede a una final. Y ni que hablar si el club en cuestión logra ese objetivo luego de 42 años en los que no pudo acceder a una instancia tan decisiva. Eso consiguió este jueves el Eintracht Frankfurt, luego de dejar en el camino a West Ham, de Inglaterra. El club alemán se impuso este jueves por 1-0 como local y así accedió al partido final.

La final se jugará el miércoles 18 de mayo, a las 16 hora argentina, en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán de Sevilla, España. Se enfrentará a Glasgow Rangers, de Escocia, que revirtió el 0-1 de la ida y se impuso en su estadio a Leipzig, también de Alemania, por 3 a 1. James Tavernier, Glen Kamara y John Lundstram anotaron para los escoceses y descontó Christopher Nkunku.

Uno de los más desbordados en el festejo fue el arquero Kevin Trapp, que -vestido de naranja flúo- empezó una carrera loca y trató de abrazarse con todo hincha que se le cruzaba por el camino.

Rafael Santos Borré (máximo goleador de River durante la conducción técnica de Marcelo Gallardo) anotó a los 26 minutos para Frankfurt, que ya había ganado en el choque de ida (2-1 en Londres). En West Ham fue titular otro ex River, Manuel Lanzini, pero fue reemplazado a los 21 minutos del primer tiempo luego de que su equipo se quedara con diez por la expulsión de Aaron Cresswell.

El Eintracht continúa así con su gran aventura por esta competición, donde en los cuartos de final dio la gran sorpresa al eliminar al Barcelona, llegando a imponerse 3-2 en la vuelta en el Camp Nou. En el caso del Glasgow Rangers, su remontada empezó a ser una realidad con los goles de James Tavernier (18) y Glen Kamara (24) antes de la media hora de partido en Ibrox Park. El francés Christopher Nkunku dio esperanzas brevemente al RB Leipzig al acortar a 2-1 en el 70. Ese resultado mandaba la semifinal virtualmente a la prórroga, pero John Lundstram firmó el 3-1 definitivo en el 80 y selló el billete de los Rangers a la gran final.

La final Eintracht-Rangers es inesperada y pone frente a frente a dos equipos que no partían entre los favoritos del torneo pero que han destacado por su gran combatividad y entusiasmo a lo largo de las rondas decisivas. “Esto es un sueño hecho realidad. La ciudad se lo merece. Ahora vamos a ganar (la final)”, afirmó el presidente del Eintracht, Peter Fischer, según consigna la agencia AFP.

El Eintracht fue campeón de este torneo en 1980 cuando se conocía como Copa de la UEFA. Esta competición es su gran oportunidad para hacer histórica su temporada, que en la Bundesliga está siendo muy discreta (11º a dos jornadas para el final). Glasgow Rangers también tiene un título en las competiciones europeas, en su caso en la extinta Recopa de Europa de 1972.